21 diciembre 2006

RBA compra la revista de humor 'El Jueves'

El Grupo RBA ha llegado a un acuerdo para comprar el 60% de la editora de la conocida revista de humor 'El Jueves'. Los actuales propietarios de la revista, Óscar Nebreda y Jose Luis Martín Zabala, conservarán el 40% restante tras la operación, que permitirá, entre otros proyectos, "llevar a soporte audiovisual el inconfundible humor de esta cabecera".

'El Jueves', que lleva 30 años en los quioscos españoles, es una revista "emblemática" en el campo del humor y, según destaca RBA, ostenta "una posición de liderazgo absoluto en su segmento, con una audiencia de más de 420.000 lectores y unas ventas superiores a los 75.000 ejemplares cada semana".

En relación con la operación, José Luis Martín, uno de los fundadores y accionistas de 'El Jueves', indicó que Internet, la telefonía móvil y la televisión presentan "cada vez más posibilidades para un humor satírico e inteligente" como el que hace 'El Jueves'. "La entrada en nuestra empresa de un grupo tan fuerte como RBA nos permitirá impulsar ése y otros proyectos", agregó.

El Grupo RBA, un grupo familiar de capital cien por cien español, edita entre otras publicaciones como 'National Geographic', 'Historia National Geographic', 'El Mueble', 'Arquitectura y Diseño', 'Casa al Día', 'Cosas de Casa', 'Única', 'Cuerpomente', 'Mente Sana' ó 'Saber Vivir'.

Además, tras la reciente unión de las actividades de RBA Revistas con Edipresse, también participará a través de RBA Edipresse en las cabeceras de Edipresse Hymsa 'Lecturas', 'Sorpresa', 'Clara', 'Comer Bien', 'Patrones', 'Rutas del Mundo' o 'Tu Bebé', entre otras.

El Grupo RBA obtuvo una facturación bruta consolidada en 2005 de 345 millones de euros y unos beneficios después de impuestos de 24 millones de euros.



EUROPA PRESS; 20/12/2006


PS.- No es por casualidad que los grupos editoriales que huyen de la "faxenderia" y se ponen a trabajar de verdad, con equipos de "profesionales" acaban progresando y proporcionando a sus trabajadores, sus autores y sus lectores buenos productos y, a la vez, buenos dividendos a sus propietarios.
Otros siguen la senda del derribo, con directivos desconocedores del medio, con un menosprecio a los propios empleados, y encima se las dan de "mucho" (primer grupo editorial de Catalunya, con un par).

20 diciembre 2006

Lectura de los clásicos


Ahora ya os puedo soltar mi recomendación. Siempre he sido partidario de las grandes lecturas. Pausadas, perseverantes, al principio duras, casi impenetrables, pero luego tan frondosas, reveladoras y gratificantes. Son lecturas como una gestación. Hay quien transita por los tres trágicos griegos, por Plutarco, Virgilio, Dante o Proust como Pedro por su casa. Hay quien todavía no lo ha probado, o lo ha dejado con espanto a las primeras de cambio. Mi consejo es que perseveréis. Al principio, puede ser duro, incluso muy duro, pero la recompensa es segura. La recomendación no sería tal si no incluyera una receta para los que tenéis dificultades con las grandes obras del pasado. Pero antes remachar que, si en la mayoría de las mejores del presente hay discusión sobre el alcance de su grandeza, de modo que el juicio definitivo irá a cargo de la posteridad, todas las que han pasado la prueba del tiempo son grandes de verdad. No hay falsas obras universales. Ni una. En ningún dominio del arte.

El problema, para muchos, es que suelen atragantarse. En ese caso disminuid la dosis, si queréis hasta la homeopática de un par o tres de páginas diarias, pero sin saltarse un día, sin leer a la ligera, tomando nota mental e incluso apuntando (lo que sea, también las dificultades). Si así perseveráis, seréis grandes lectores. Porque sólo es gran lector quien hace grandes lecturas


Xavier Bru de Sala; suplemento CULTURAS; 20.12.2006

19 diciembre 2006

¿Una victoria pírrica?


Las librerías, para sobrevivir, deben ganar en eficiencia empresarial
La reciente aprobación por parte del Consejo de Ministros del proyecto de ley del Libro ha suscitado una sensación de alivio entre los representantes gremiales de los libreros catalanes. La consagración del precio fijo del libro, dicen, asegura la viabilidad de las pequeñas librerías independientes y frena los pies a la agresiva expansión de Abacus, que, basándose en la ley catalana de Cooperativas, gana cuota de mercado practicando descuentos - a sus socios clientes- que están fuera del alcance de los demás establecimientos. Al ser de mayor rango, la ley española del Libro derogaría automáticamente la potestad de las cooperativas catalanas de practicar descuentos en dicha materia.

Sin embargo, el mantenimiento del precio fijo del libro difícilmente asegurará, por sí mismo, el futuro de las librerías independientes si los libreros responsables de éstas no modernizan su gestión empresarial y adoptan además de forma masiva estrategias basadas en la cooperación y/ o en la diferencia. Porque a pesar de que el libro es un hecho cultural y puede justificar algunas regulaciones específicas por parte de la Administración, estamos sin duda cada vez más ante una mercancía. En la medida en que crece la compra de libros y éstos dejan de ser un reducto destinado de forma casi exclusiva a las elites culturales, aumenta en ellos el peso de la mercancía y decrece el de la cultura. Tenemos muchos ejemplos de ello y no es el menor el trasiego de libros que acompaña la venta de prensa cada domingo.

El desarrollo de la compra por impulso o el extraordinario crecimiento de géneros de no ficción, como pueden ser, por ejemplo, los manuales de autoayuda o también las guías de viajes, refuerzan el carácter de mercancía de la venta de libros.

Así que, puestos a vender mercancías, no podemos obviar en las librerías las tendencias generales de la venta al detalle de la inmensa mayoría de productos. Ello comporta, por ejemplo, que las pequeñas empresas comerciales tienen muy difícil su supervivencia si no se especializan o no colaboran entre sí. Es verdad que ya es una especialización la atención personalizada y la orientación y el consejo de un librero que es un buen y ávido lector. Pero esto sólo vale para una porción cada vez menor de los clientes y, por tanto, de librerías.

Hay algunos ejemplos de librerías que han iniciado con éxito vías de especialización, que muchas veces deben ser complementarias entre sí: desde los restos de serie hasta las especializaciones temáticas; combinar la venta de libros con la de otros productos, culturales o no, o la prestación de servicios de restauración.

Pero, además, las librerías deben ganar eficiencia empresarial, sea por la vía de las economías de escala, convirtiéndose en cadenas o asociándose a pequeñas editoriales; sea por la vía de la cooperación, a la hora de negociar las condiciones económicas con las distribuidoras y editoriales, de realizar promociones conjuntas, de mejorar la logística de la distribución o de formar personal cualificado, etcétera.

Y todo ello reforzando unas especificidades que convierten a la librería en algo más que un establecimiento comercial que merece un trato singular desde los poderes públicos: una plataforma de actividades culturales complementarias - y no sólo por Sant Jordi-, una atención preferente al libro en catalán que contribuya a compensar su debilidad en traducciones y en no ficción o una disponibilidad y accesibilidad a los libros de fondo, que son los que dan el tono a una cultura más allá de los best sellers.

Éstas son las condiciones para la supervivencia de las librerías independientes. De otro modo, la futura ley del Libro sólo habrá constituido para ellas una victoria pírrica.


La Vanguardia; 19.12.2006; ENRIC LLARCH, economista

Un tercio de los libros expuestos en las librerías son en lengua catalana

Uno de cada tres libros expuestos en las librerías tradicionales es en catalán, una proporción que en las grandes superficies se reduce a un título de cada seis. Éste es uno de los datos llamativos del estudio La presència del llibre en català al comerç minorista de llibres de Catalunya,que, por encargo de la Associació d´Editors en Llengua Catalana, ha realizado la consultora BCF.


El objetivo del informe, inédito en su planteamiento, era comprobar el lugar que ocupa el libro en catalán en los comercios, y en especial examinar su grado de colocación con las portadas visibles como técnica de estímulo de venta. Yla conclusión es que este estímulo es débil. Por ello, los editores llevarán adelante una segunda fase de su estrategia, para estudiar medidas que refuercen la presencia del libro en catalán de cara a facilitar su venta.

El estudio se ha efectuado mediante encuestas personalizadas a más de 400 librerías de Catalunya: una muestra de 75 de tipo mediano, todos los puntos de venta de las grandes superficies (El Corte Inglés, FNAC y Casa del Llibre), todos los hipermercados, y una muestra de 72 librerías de dimensión pequeña.

El fondo de libros en catalán (visibles sólo por sus lomos en las estanterías) representa entre un 40% y un 50% del total en las librerías tradicionales, incluyendo en este porcentaje la literatura, la divulgación y el libro práctico y la literatura infantil y juvenil. En las grandes superficies, en cambio, la proporción es sólo del 26%, y en los hipermercados, del 21%. Si se observa la proporción de libros colocados en expositores (con sus cubiertas visibles), algo más de un 30% son en catalán en las librerías tradicionales, frente a un 16% en las grandes superficies.

Xavier Cubeles, director del estudio presentado ayer, dijo que hay que tomar medidas para "estimular el hábito de lectura en catalán" y "mejorar las estrategias de marketing", que actualmente hacen que la venta de libros en catalán se concentre sobre todo en Sant Jordi.

17 diciembre 2006

Discursos dobles

Defensar els instruments que acompanyen la lectura

No parem de veure campanyes de cara al foment de la lectura. Lectura, més lectura i encara més lectura. Per terra, mar i aire, sentim constantment invitacions públiques a la lectura. Cíclicament surten a tots els diaris els resultats d'estudis recents sobre la lectura, acompanyats de lamentacions dignes dels profetes de l'Antic Testament. El ministeri de Madrid posa sucosos anuncis a la televisió a la cotitzada franja de prime time que insinuen que l'harmonia familiar i social penja del fil de la lectura. La xarxa de biblioteques municipals de Barcelona sempre està creant noves i enginyoses estratègies per atreure lectors de tota casta. Es va celebrar l'any passat amb bombos i platerets el prodigiós Any del Llibre i la Lectura, en què es van abocar sense miraments tots els estaments oficials, municipals, provincials i nacionals, a més de tots els mitjans sense exclusió. Des de fa dos anys es munta a la Fira de Montjuïc el Saló del Llibre, que, d'una manera o altra, sempre gira a l'entorn d'una sola idea central: la importància vital del fenomen de la lectura a tots els nivells.

Ara bé, per l'altra banda, constato amb astorament que, al mateix ritme trepidant, van desapareixent, neutralitzant-se, erosionant-se, marginalitzant-se o sectaritzant-se moltes de les eines de les quals disposen els lectors comuns per apropar-se o endinsar-se en el fabulós món de la lectura. I la cosa té delicte, perquè ha anat de bufetada en bufetada. En aquest sentit, deveu recordar igual de bé que jo la bufetada que va significar la desaparició de l'esplèndid magazín cultural de Jordi Llavina, el Fum d'Estampa. D'un dia per l'altre, passi-ho bé! Ah, ens havíem de fer moderns i la cultura es dosifica en petits bits o pastilles. Ens hi vam conformar, i després, al cap de poc temps, ens va arribar una bufetada encara més grossa, l'enfonsament a la manera del Titanic de tota l'emissora Catalunya Cultura!


I prepareu-vos, que ara vénen dues galtades més! Tanquen els programes de televisió De llibres i Saló de lectura. Tururut viola, i Vicenç Villatoro, Natza Farré i Marina Espasa, cap a les seves cases respectives. És incomprensible que tanquin De llibres justament quan començava a fer forat, quan començava a tenir solera. Difícilment tornarà a haver-hi a la televisió pública un programa que aposti tant per la lectura i pels llibres. Però aquest és el típic modus operandi de la televisió: tallar el cap d'un programa de llibres abans que acabi d'arrelar. Malauradament, coneixem aquest principi general des que es va volatilitzar l'Avisa'ns quan arribi el 2000. Ens tornarà a tocar el sermonet apologètic de rigor: ja vindrà una altra cosa. Sempre endavant, tot nou i sense consolidar res! Magnífic! Ara ja sabeu el que toca: arrapar-vos ben fort a Book insígnia, el meravellós programa de Jordi Llavina i Gaspar Hernàndez que també creu sincerament en la literatura i la lectura. Un altre producte de primera! Potser que no ho digui tan alt, no fos cas que els de Comunicàlia s'hi repensessin.

Al mateix temps, greus problemes amenacen altres eines de promoció de la literatura i la lectura. Per exemple, revistes com Serra d'Or, El Temps i la recent Benzina no arriben pas a tenir prou incidència en el sistema cultural del país. Aquestes tribunes necessiten molta més megafonia de la que actualment tenen, però no ens hem de preocupar, perquè ni institucions, ni entitats, ni associacions ni mitjans no prendran cartes de veritat en la qüestió. Alguna taula rodona, algun anunci, i para de comptar. Alguns suplements literaris van perdent credibilitat per moments i s'han convertit en autèntics guetos sectaris dels quals molts lectors desconfien sistemàticament. I com a conseqüència, els suplements que són referents d'obertura i pluralitat, com ara els de l'AVUI, El Mundo i el que queda del d'El Periódico, en molts casos paguen la factura del just pel pecador.

Queda més que clar que estem davant d'un cas flagrant fins al deliri de discursos dobles. Les institucions, les entitats, les associacions i els mitjans, per una banda, presten molta parola a la promoció de la lectura, però, per l'altra, permeten la destrucció d'eines que els lectors necessiten per navegar pel món dels llibres. Qualsevol lector que s'atreveixi a creuar el llindar d'una llibreria quedarà ràpidament aclaparat i directament deprimit per la quantitat de llibres que tenim a la nostra disposició per llegir. Per això, aquest mateix lector comú necessita com l'aire que respira programes de televisió, programes de ràdio, revistes, suplements de llibres, per tal d'orientar-se en el vast univers dels llibres que tenim al mercat. Sense aquestes eines, milers de lectors potencials no se senten encoratjats a saltar la barrera de la indiferència i milers de lectors bons es desorienten i després d'una temporada a la deriva desisteixen.

Prou discursos dobles. A més de les vistoses campanyes a favor de la lectura, les institucions, les entitats, les associacions i el mitjans tenen l'obligació intel·lectual, moral, social i política de crear i defensar tots els instruments necessaris que acompanyen la lectura. Moltes vegades amb el llibre pelat no n'hi ha prou. Cal animar els lectors i no confondre'ls amb discursos dobles i faltes alarmants de solidaritat.


AVUI; Sam Abrams; Poeta, assagista i traductor